¿Realmente merecíamos tanto amor?

¿Realmente merecíamos tanto amor?

¿Realmente merecíamos tanto amor? ¿Estamos haciendo algo por ser merecedores ese AMOR? Cuando estamos bien y nada anda mal, en muy pocas ocasiones nos acordamos del SEÑOR. En muy pocas ocasiones recordamos lo que EL hizo en SU pasión y muerte. En muchas ocasiones le damos la espalda. No es hasta que llega el tiempo malo, que en medio del sufrimiento y el dolor nos acordamos de EL. Entonces sí, vamos donde EL, quebrantados y destruidos, pidiéndole que nos ayude. Luego pretendemos que nos saque de ese dolor y desesperación inmediatamente. Le decimos; SEÑOR, "mira por lo que estoy pasando, mira todo lo que me está cayendo enzima y todavía me cae mas". Allí en ese calvario y en esa cruz EL sufrió mucho más de lo que tú y yo podemos sufrir y soportar. Pedimos y pedimos que nos ayude, ¿pero que estamos haciendo para que nos de lo que le pedimos? ¿Que estamos haciendo para mover su corazón y ponga SU mano en nosotros? ¿Estamos haciendo lo suficiente? Vamos a comenzar hoy a hacer cosas que muevan el corazón de DIOS. EL, en su misericordia nos está ayudando, pero se agradaría mas viéndonos buscar más de EL, se agradaría mas viéndonos trabajar más en SUS terrenos, en SUS campos. Esparciendo y sembrando las semillas. Hermanos hay mucho trabajo que hacer y para darte cuenta lo único que tienes que hacer es, mirar a tu lado. EL nos necesita, son miles los que se pierden. Vamos a soltar nuestras cargas ante EL y vamos a tomar las SUYAS. EL quiere que vallamos donde EL, porque nos dará descanso. Así lo dice Mateo 11:28-30

11:28 Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar.
11:29 Llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallaréis descanso para vuestras almas;
11:30 porque mi yugo es fácil, y ligera mi carga.

EL lo dio todo por nosotros. ¿Que crees que podamos hacer por EL? ¿Que es lo más que a EL le interesa? ¿Sera la humanidad? EL ya lo hizo todo, ahora nos toca a nosotros hacer algo por nosotros. EL se agradara si hacemos esto y pondrá SU mano en nuestras vidas, y en todas las cosa que ágamos. Hermanos, ya es hora que nos quitemos los pantalones cortos y nos pongamos los largos. Llego la hora de trabajar y dejarle a al SEÑOR nuestras cargas. DIOS, te amo.