El tiempo de los milagros no ha pasado.
DIOS tiene para ti una lluvia de amor. Hay un nuevo amanecer que hoy despunta y con él, la oportunidad que le demuestres a DIOS que le crees a EL y crees en ti. Dice el Salmo 121
121:1 Alzaré mis ojos a los montes;
¿De dónde vendrá mi socorro?
121:2 Mi socorro viene de Jehová,
Que hizo los cielos y la tierra.
121:3 No dará tu pie al resbaladero,
Ni se dormirá el que te guarda.
121:4 He aquí, no se adormecerá ni dormirá
El que guarda a Israel.
121:5 Jehová es tu guardador;
Jehová es tu sombra a tu mano derecha.
121:6 El sol no te fatigará de día,
Ni la luna de noche.
121:7 Jehová te guardará de todo mal;
El guardará tu alma.
121:8 Jehová guardará tu salida y tu entrada
Desde ahora y para siempre.
¿De dónde vendrá mi socorro?
121:2 Mi socorro viene de Jehová,
Que hizo los cielos y la tierra.
121:3 No dará tu pie al resbaladero,
Ni se dormirá el que te guarda.
121:4 He aquí, no se adormecerá ni dormirá
El que guarda a Israel.
121:5 Jehová es tu guardador;
Jehová es tu sombra a tu mano derecha.
121:6 El sol no te fatigará de día,
Ni la luna de noche.
121:7 Jehová te guardará de todo mal;
El guardará tu alma.
121:8 Jehová guardará tu salida y tu entrada
Desde ahora y para siempre.
El tiempo de los milagros no ha pasado. DIOS tiene un milagro para ti. Abre tus brazos y tu corazón y recibe lo que DIOS tiene para ti. Créelo, no dudes porque es tuyo. Cree en SU palabra, cree en SU promesa, cree en lo imposible, cree en lo inexplicable, porque es tuyo. Es para ti y nadie te lo puede quitar. Entra hoy en la lluvia de amor que DIOS ha derramado para ti. Recuerda esto; El tiempo de los milagros no ha pasado. DIOS, te amo.
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