jueves, 11 de agosto de 2011

Yo te busco.

Yo te busco.

Cuando buscas a DIOS en espíritu y verdad, DIOS se agrada y honra a tales a doradores.
JESUCRISTO dice en Juan 4:23-24;

4:23 Mas la hora viene, y ahora es, cuando los verdaderos adoradores adorarán al Padre en espíritu y en verdad; porque también el Padre tales adoradores busca que le adoren.
4:24 Dios es Espíritu; y los que le adoran, en espíritu y en verdad es necesario que adoren.

En el antiguo testamento de la Biblia, nos revela que la adoración a DIOS generalmente era acompañada por el sacrificio de animales. Pero después que JESUCRISTO entrego su vida por nosotros se ofrece sacrificio de alabanza y así lo revela el nuevo testamento en Hebreos 13:15;

13:15 Así que, ofrezcamos siempre a Dios, por medio de él, sacrificio de alabanza, es decir, fruto de labios que confiesan su nombre.

Cuando comienzas a alabar a DIOS en espíritu y en verdad, es cuando tu espíritu se conecta directamente con DIOS. Esto ocurre porque lo estás haciendo con sinceridad y no para que otros vean cuan religioso eres o cuan espiritual eres. Cuando adoras en espíritu y en verada generalmente tu mente racional es ayudada por el ESPÍRITU SANTO. Comienzas hablar lenguas del espíritu, para entrar en una comunicación y relación directa con DIOS. Esto está en, 1 Corintios 14:2;

14:2 Porque el que habla en lenguas no habla a los hombres, sino a Dios; pues nadie le entiende, aunque por el Espíritu habla misterios.

Si desea llegar a tener un grado profundo de oración, adoración y alabaza, dile al ESPIRITU SANTO que quieres y deseas entrar en la presencia de DIOS. Que es tu anhelo, el ESPÍRITU SANTO va a interceder por ti y te ayudará. Así lo revela en Romanos 8:26

8:26 Y de igual manera el Espíritu nos ayuda en nuestra debilidad; pues qué hemos de pedir como conviene, no lo sabemos, pero el Espíritu mismo intercede por nosotros con gemidos indecibles.

Así que comienza a alabar a DIOS en espíritu y verdad. DIOS se agrada de esto y te honra por ello. Cuando hay en ti un deseo ardiente de buscar SU rostro y SU presencia hay bendiciones para ti, para tu familia y descendencia. Así que comienza a decirle al PADRE ETERNO; Yo te busco. DIOS te amo.



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