Mis manos has llenado.

Mis manos has llenado.

Hoy daré una palabra que DIOS ha puesto en mi corazón. Estamos llegando al fin de los tiempos y DIOS necesita de cada uno de nosotros. EL es soberano y todo poderoso. EL puede con solo abrir su boca cambiar todo a su manera. Pero no, EL desea usarnos a nosotros y necesita de nuestras manos y nuestros pies. EL necesita nuestras manos para depositar en ellas una serie de bendiciones, talentos y poder. Nuestros pies para que pongamos en marcha lo que EL depositará en nuestras manos. Estamos en el fin de los tiempos y así lo ha hecho saber por su palabra y por sus ministros, que mediante su palabra les ha revelado la cercanía del fin del tiempo. Hoy DIOS pone en mi corazón que EL pondrá en las manos de su pueblo una serie de bendiciones, talentos y poder, como nunca antes lo ha hecho. Al que le sea depositado bienes es sus manos, pida dirección y sabiduría a DIOS. Porque te ha puesto como administrador de sus bienes para que bendigas a otros y su palabra se mueva hasta los confines de la tierra. Al que le deposite poder, esto es poder para sanar, poder para libertar y romper cadenas. Al que se le deposite este poder en sus manos vele que no crezca su vanidad y creerse que son obras de sus manos y no de DIOS. Esto mismo que acabo de expresar, cuídese el que le deposite bendición en sus manos. Que la vanidad y el orgullo de haber sido bendecido, lo haga creer que fue producto de sus manos y desvié su camino del propósito de DIOS. Porque encontrara el fin. Aquí hay algo especial y es que al que DIOS le deposite los talentos en sus manos. DIOS los llenará en sobreabundancia porque estos son los que se encargaran de sembrar la semillas y recoger los frutos. No con esto quiero decir que los demás estén exentos de hacerlo, no. Todos estamos llamados a sembrar la semilla y a recoger los frutos. Van a haber algunos que DIOS les llene sus manos con las tres o dos de las cosa que EL depositará en nuestras manos, pero son bien pocos. Pero todos tenemos que trabajar como uno, todos somos parte de un solo cuerpo. Pida dirección y sabiduría a DIOS por lo que está por venir. Recuerden somos sus manos y sus pies y si no hacemos nuestro trabajo bien, DIOS vendrá a reclamarnos. Vamos a devolverle aunque sea una ínfima parte de su sacrificio. DIOS te amo.