martes, 29 de noviembre de 2011

Por tu obediencia…

Por tu obediencia…


¿Cuales son tus muros hoy? ¿Cuáles son los muros que están impidiendo que seas feliz, que recibas tu bendición? Tu enfermedad, tus finanzas, tu trabajo, tus familiares, las personas que te están haciendo la vida de cuadritos y muchos otros muros más. Cuando el pueblo de Israel fue a entrar a la tierra prometida se encontraron unas murallas altas. DIOS le dio unas instrucciones a Josué. Esto está en Josué 6: 3-5.

6:3 Rodearéis, pues, la ciudad todos los hombres de guerra, yendo alrededor de la ciudad una vez; y esto haréis durante seis días. 6:4 Y siete sacerdotes llevarán siete bocinas de cuernos de carnero delante del arca; y al séptimo día daréis siete vueltas a la ciudad, y los sacerdotes tocarán las bocinas. 6:5 Y cuando toquen prolongadamente el cuerno de carnero, así que oigáis el sonido de la bocina, todo el pueblo gritará a gran voz, y el muro de la ciudad caerá; entonces subirá el pueblo, cada uno derecho hacia adelante.

En ocasiones DIOS nos da unas instrucciones que parecen no tener sentido. Pero a DIOS no hay que entenderlo, hay que obedecerlo. El pueblo de Israel no dudo y comenzó a dar las 7 vueltas, comenzó a moverse, comenzó a marchar. Al terminar la séptima vuelta los muros cayeron. No fueron las vueltas, ni los gritos los que derivaron los muros. Fue la obediencia a lo que DIOS les dijo el detonante para que los muros de Jericó cayeran. DIOS ha venido hablándote por mucho tiempo y porque lo que te parece ilógico lo que te pide no has recibido tu bendición. Como te dije antes a DIOS no hay que entenderlo, hay que obedecerlo. Comienza a marchar y veras como tus muros caerán. DIOS te amo.



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