sábado, 29 de junio de 2013

Tan solo cree.


Tan solo cree.

DIOS fue quien te escogió y te hizo SU siervo, no te desecho y te puso frente a EL para bendecirte. Dice Isaías 41:9-10
41:9 Porque te tomé de los confines de la tierra, y de tierras lejanas te llamé, y te dije: Mi siervo eres tú; te escogí, y no te deseché.
41:10 No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia.

Así que no temas y esfuérzate, busca tu milagro, busca tu sueño. DIOS quiere bendecirte, dice en 3 Juan 1:2 Amado, yo deseo que tú seas prosperado en todas las cosas, y que tengas salud, así como prospera tu alma.

Confía porque DIOS suplirá todo lo que te haga falta. Dice en Filipenses 4:19 Mi Dios, pues, suplirá todo lo que os falta conforme a sus riquezas en gloria en Cristo Jesús.

Así que pon tu fe en acción y declara las cosas que son como si fueran, Así lo dice en Hebreos 11:1 Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve. 
Y dice en el 11:3 Por la fe entendemos haber sido constituido el universo por la palabra de Dios, de modo que lo que se ve fue hecho de lo que no se veía. 

Pues si lo que se ve fue hecho de lo que no se veía, declara tu milagro por tu boca y créelo. Si el enemigo te viene a engañar para robarte tu bendición poniendo cosas de tu pasado y que no eres merecedor de lo que DIOS tiene para ti mira lo que dice en Hebreos 4:13-16
4:13 Y no hay cosa creada que no sea manifiesta en su presencia; antes bien todas las cosas están desnudas y abiertas a los ojos de aquel a quien tenemos que dar cuenta.
4:14 Por tanto, teniendo un gran sumo sacerdote que traspasó los cielos, Jesús el Hijo de Dios, retengamos nuestra profesión.
4:15 Porque no tenemos un sumo sacerdote que no pueda compadecerse de nuestras debilidades, sino uno que fue tentado en todo según nuestra semejanza, pero sin pecado.
4:16 Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro.

Así que no te dejes engañar y ve ante el trono de la gracia y pide con fe, y confiadamente, Que el que está sentado en el trono de la gracia va a escucharte y dará su palabra a tu favor. DIOS, te amo.


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