TU palabra es medicina.
EL SEÑOR ha puesto su mirada en ti. Te ha escogido entre tantos. EL necesita hoy de ti. Necesita que lleves su amor y palabra a otros. Sí, a otros. Sé que piensas porque a otros, si el que necesita hoy soy yo. Cuando tú llevas la palabra de DIOS a otros, cuando llevas el amor del SEÑOR a otros. Estas llevando medicina a esa otra persona. Porque su palabra es medicina a su cuerpo y alma. La palabra de DIOS es viva. Cuando le das la palabra de DIOS a otra persona no se queda ahí. Esa palabra regresa hacia ti otra vez y no regresa vacía. Viene multiplicada y será medicina para ti también. Restaurará tu cuerpo y tu alma. Te llenará de vida porque la palabra es vida y no solo vida, es amor. Es el mismo SEÑOR en su palabra. Regálale al SEÑOR tu ser, para que seas el instrumento de sanidad y vida para otros. Dile al SEÑOR; TU palabra es medicina. Lléname de TU palabra, para que yo pueda tener mi frasco lleno y podérsela servir a otros. DIOS te amo.
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