No pierdas un segundo más.
No pierdas un segundo más. El tiempo no se
detiene sigue avanzando. Lo que hiciste ahora ya es pasado y no lo puedes borrar.
Puedes hacer algo para cambiarlo o mejorarlo. Dicho esto quiero decirte, ¿Por qué
te pasas quejándote de todo? ¿Por qué le encuentras faltas a todo? Lo haces en
tu casa, en tu trabajo, es tu Iglesia, hasta en tu vecindario y no se diga del gobierno.
¿Has podido cambiar algo con eso? Entonces esa forma de actuar no funciona. Lo único
que sacas de eso es enojo, frustración, desilusión, acidad, cansancio y te
causa enfermedad, tanto física, mental y espiritual. Tú tienes el control para
cambiarlo todo. Piensa esto, no hay nadie igual a ti y no hay personas
perfectas, no hay personas que te puedan leer tu mente para saber qué es lo que
quieres y entender a la perfección lo que deseas que hagan. JESUCRISTO siendo
DIOS se humillo, tomo el lugar de siervo y se engrandeció. Lee bien y deja que
DIOS hable a tu vida a través de esta palabra que está en Juan 13:3-17
detiene sigue avanzando. Lo que hiciste ahora ya es pasado y no lo puedes borrar.
Puedes hacer algo para cambiarlo o mejorarlo. Dicho esto quiero decirte, ¿Por qué
te pasas quejándote de todo? ¿Por qué le encuentras faltas a todo? Lo haces en
tu casa, en tu trabajo, es tu Iglesia, hasta en tu vecindario y no se diga del gobierno.
¿Has podido cambiar algo con eso? Entonces esa forma de actuar no funciona. Lo único
que sacas de eso es enojo, frustración, desilusión, acidad, cansancio y te
causa enfermedad, tanto física, mental y espiritual. Tú tienes el control para
cambiarlo todo. Piensa esto, no hay nadie igual a ti y no hay personas
perfectas, no hay personas que te puedan leer tu mente para saber qué es lo que
quieres y entender a la perfección lo que deseas que hagan. JESUCRISTO siendo
DIOS se humillo, tomo el lugar de siervo y se engrandeció. Lee bien y deja que
DIOS hable a tu vida a través de esta palabra que está en Juan 13:3-17
13:3 sabiendo
Jesús que el Padre le había dado todas las cosas en las manos, y que había
salido de Dios, y a Dios iba,
13:4 se levantó de la cena, y se quitó su
manto, y tomando una toalla, se la ciñó.
13:5 Luego puso agua en un lebrillo, y comenzó
a lavar los pies de los discípulos, y a enjugarlos con la toalla con que estaba
ceñido.
13:6 Entonces vino a Simón Pedro; y Pedro le
dijo: Señor, ¿tú me lavas los pies?
13:7 Respondió Jesús y le dijo: Lo que yo
hago, tú no lo comprendes ahora; mas lo entenderás después.
13:8 Pedro le dijo: No me lavarás los pies
jamás. Jesús le respondió: Si no te
lavare, no tendrás parte conmigo.
13:9 Le dijo Simón Pedro: Señor, no sólo mis
pies, sino también las manos y la cabeza.
13:10 Jesús le dijo: El que
está lavado, no necesita sino lavarse los pies, pues está todo limpio; y
vosotros limpios estáis, aunque no todos.
13:11 Porque sabía quién le iba a entregar;
por eso dijo: No estáis
limpios todos.
13:12 Así que, después que les hubo lavado los
pies, tomó su manto, volvió a la mesa, y les dijo: ¿Sabéis
lo que os he hecho?
13:13 Vosotros me llamáis Maestro, y Señor; y decís
bien, porque lo soy.
13:14 Pues si yo, el Señor y el Maestro, he lavado
vuestros pies, vosotros también debéis lavaros los pies los unos a los otros.
13:15 Porque ejemplo os he dado, para que como yo os
he hecho, vosotros también hagáis.
13:16 De cierto, de cierto os digo: El siervo no es
mayor que su señor, ni el enviado es mayor que el que le envió.
13:17 Si sabéis estas cosas, bienaventurados
seréis si las hiciereis.
Jesús que el Padre le había dado todas las cosas en las manos, y que había
salido de Dios, y a Dios iba,
13:4 se levantó de la cena, y se quitó su
manto, y tomando una toalla, se la ciñó.
13:5 Luego puso agua en un lebrillo, y comenzó
a lavar los pies de los discípulos, y a enjugarlos con la toalla con que estaba
ceñido.
13:6 Entonces vino a Simón Pedro; y Pedro le
dijo: Señor, ¿tú me lavas los pies?
13:7 Respondió Jesús y le dijo: Lo que yo
hago, tú no lo comprendes ahora; mas lo entenderás después.
13:8 Pedro le dijo: No me lavarás los pies
jamás. Jesús le respondió: Si no te
lavare, no tendrás parte conmigo.
13:9 Le dijo Simón Pedro: Señor, no sólo mis
pies, sino también las manos y la cabeza.
13:10 Jesús le dijo: El que
está lavado, no necesita sino lavarse los pies, pues está todo limpio; y
vosotros limpios estáis, aunque no todos.
13:11 Porque sabía quién le iba a entregar;
por eso dijo: No estáis
limpios todos.
13:12 Así que, después que les hubo lavado los
pies, tomó su manto, volvió a la mesa, y les dijo: ¿Sabéis
lo que os he hecho?
13:13 Vosotros me llamáis Maestro, y Señor; y decís
bien, porque lo soy.
13:14 Pues si yo, el Señor y el Maestro, he lavado
vuestros pies, vosotros también debéis lavaros los pies los unos a los otros.
13:15 Porque ejemplo os he dado, para que como yo os
he hecho, vosotros también hagáis.
13:16 De cierto, de cierto os digo: El siervo no es
mayor que su señor, ni el enviado es mayor que el que le envió.
13:17 Si sabéis estas cosas, bienaventurados
seréis si las hiciereis.
Dejemos de protestar tanto y comencemos a vivir
una vida de servicio imitando a JESUCRISTO. Con esto no quiero decir que te rebajes
ante los demás, es que hagas las cosas como te gustaría a ti que te las
hicieran. Mira bien como lo dice JESUCRISTO,
una vida de servicio imitando a JESUCRISTO. Con esto no quiero decir que te rebajes
ante los demás, es que hagas las cosas como te gustaría a ti que te las
hicieran. Mira bien como lo dice JESUCRISTO,
13:15 Porque
ejemplo os he dado, para que como yo os he hecho, vosotros también hagáis.
13:16 De cierto, de cierto os digo: El siervo no es
mayor que su señor, ni el enviado es mayor que el que le envió.
13:17 Si sabéis estas cosas, bienaventurados
seréis si las hiciereis.
ejemplo os he dado, para que como yo os he hecho, vosotros también hagáis.
13:16 De cierto, de cierto os digo: El siervo no es
mayor que su señor, ni el enviado es mayor que el que le envió.
13:17 Si sabéis estas cosas, bienaventurados
seréis si las hiciereis.
Tenemos que pensar y servir como lo
hacemos para EL. DIOS, te amo.
hacemos para EL. DIOS, te amo.
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