viernes, 6 de junio de 2014

Declara tu bendición.

Declara tu bendición.



Todo lo que declares por tu
boca tiene poder. Esa palabra no retorna atrás vacía. Esto es porque DIOS nos
hizo a SU imagen y semejanza. Mira lo que dice aquí en Santiago3:5-10



3:5 Así también la lengua es
un miembro pequeño, pero se jacta de grandes cosas. He aquí, ¡cuán grande
bosque enciende un pequeño fuego! 

3:6 Y la lengua es un fuego, un mundo de maldad. La lengua está puesta entre
nuestros miembros, y contamina todo el cuerpo, e inflama la rueda de la
creación, y ella misma es inflamada por el infierno. 

3:7 Porque toda naturaleza de bestias, y de aves, y de serpientes, y de seres
del mar, se doma y ha sido domada por la naturaleza humana; 

3:8 pero ningún hombre puede domar la lengua, que es un mal que no puede ser
refrenado, llena de veneno mortal. 

3:9 Con ella bendecimos al Dios y Padre, y con ella maldecimos a los hombres,
que están hechos a la semejanza de Dios.

3:10 De una misma boca proceden bendición y maldición. Hermanos míos, esto no
debe ser así. 




Así que comienza a bendecir
aun a tu enemigo, ¿Qué es difícil? Claro que sí, pero lo que salga por tu boca
no regresa a tras vacía, si declaras bendición, recibirás bendición y si haces
lo contrario recibirás lo que declaraste. Así que tampoco declares tus
enfermedades, no declares tu situación. Declárate en bendición y declara en bendición
a otros. Aunque no lo sientas ni lo veas, decláralo.




Tú eres un heredero de DIOS,
cuando aceptas a JESUCRISTO como tu salvador y eres sellado por el ESPIRITU
SANTO como hijo adoptivo de DIOS. Mira lo que dice en Romanos 8:15-18




8:15 Pues no habéis recibido
el espíritu de esclavitud para estar otra vez en temor, sino que habéis
recibido el espíritu de adopción, por el cual clamamos: ¡Abba, Padre! 

8:16 El Espíritu mismo da testimonio a nuestro espíritu, de que somos hijos de
Dios. 

8:17 Y si hijos, también herederos; herederos de Dios y coherederos con Cristo,
si es que padecemos juntamente con él, para que juntamente con él seamos
glorificados. 

8:18 Pues tengo por cierto que las aflicciones del tiempo presente no son
comparables con la gloria venidera que en nosotros ha de manifestarse. 




Lo que DIOS tiene para ti es
grande, no te enfoque en tu situación, ni te dejes engañar por el enemigo. Ve delante
de DIOS adórale, alábale y declara tus bendiciones. Son para ti y los tuyos, ya
EL te las dio. DIOS, te amo.




https://www.youtube.com/watch?v=8_gjMkce8N0


No hay comentarios:

Publicar un comentario